Porvenir es la capital de la Provincia de Tierra del Fuego, llamada así por Don Jorge Porter quien descubrió la Bahía, llamada “Karkamke” (aguas bajas) por los indios Onas (SelK’nam). El Presidente Jorge Montt dictó el Decreto de su Fundación el 20 de junio de 1894, para los servicios de las estancias ganaderas y de sus habitantes, quienes inicialmente eran chilotes y croatas, los cuales llegaron motivados por el descubrimiento de yacimientos de oro.
Luego de las exploraciones en busca de oro, iniciadas en la Bahía Gente Grande a comienzos del año 1879 se divulgó la noticia de la existencia de propicios campos para la crianza ovejera. Esta Información inició el movimiento de buscadores mineros y aventureros que a comienzos de 1881 se encontraban instalados en los distintos ríos y chorrillos de la sierra Boquerón.
Esta actividad que revolucionó por un tiempo la vida del naciente pueblo de Porvenir se mantuvo por escasos años hasta aproximadamente 1908-1909 y finalizó casi tan repentinamente como comenzó, debido al bajo rendimiento aurífero obtenido, en relación al enorme esfuerzo financiero y de trabajo realizado.
Parte del legado de los habitantes pioneros, se observa en una importante y valiosa arquitectura pionera, que si bien es cierto es común a otros lugares de Magallanes, en nuestra ciudad tiene una connotación especial.
Las viviendas en la época pionera se caracterizaban por tener techos a dos aguas, en su revestimiento exterior tinglado y dos o tres ventanas en fachada principal y una en fachada menor, las ventanas simétricamente dividida en cuatro.
Posteriormente construcciones de mayor tamaño, un armonioso tratamiento exterior de las maderas labradas, en forma de pies derechos, soleras, diagonales y también por combinación de ellas, entregaron al poblado, forma y estilo en la construcción, remembranzas europeas de sus esforzados habitantes,
Actualmente muchas de estas antiguas construcciones han desaparecido, pero las que aún existen reflejan una época de prosperidad y visión de quienes las levantaron, una forma de vida y cultura, un patrimonio digno de conservar y de ser legado a las futuras generaciones.